domingo, 31 de agosto de 2014

DE NUEVO SOL, ABAJO Y FRÍO (fragmento)

XXI

A Patty Hunter

Yo quedé fuera de la repartición cuando llegaron los lores a regalar dádivas a los desposeídos
me impidieron entar en las pirámeides por haberse descosido mis sandalias
en el viaje de retorno perdí camino y caravana y una turba de maleantes me arrebató mi provisión de agua
alguna vez soñé con una nube que ascendía pero enseguida un rayo inundaba la comarca
yo intenté tomar descanso después de la larga caminata pero un aluvión obligó a correr a todo peregrino
peleé por los caprichos de mi rey pero al final de la batalla jamás fui condecorado
hube de juntar piedra sobre piedra y hallé un refugio para la madrugada
me alimenté de las hierbas que conocí solo después de las fiebres que colmaron mi delirio
mas he aquí que empecé a rondar tu espacio y posesión y pronto fui habitante de tu linde
así vivo de tu abrazo y tus pestañas y también de una fe de mar abierto irrenunciable
ya no busco tesoros hundidos porque aprendí a considerar hermosa a toda prueba la teja de una casa
eran jornadas propicias porque encontré un dulce en la sal de tus sabores
tu piel es un remedio contra el día cansado contra la inercia de la sangre
sudé frío hablé entrecortado y así entendí que no hay diamante que doblegue el cristal de tu presencia
por eso anhelo tu huella porque es una marca que ha de ayudarme en una noche inentendible
yo hallé la señal de tu temblor y ahora me doy cuenta de volver a andar por tu mirada.

Fernando Balseca: De nuevo sol, abajo y frío (1992)

lunes, 25 de agosto de 2014

BABELIA EXPRESS

Show time ladies and gentlemen!
Bienvenidos al circo beat
Tuiteratura pura
Pantallas móvlies
El lenguaje destrozado en cada mensaje
El mundo en ciento cuarenta caracteres
En doscientos cincuenta y seis años nos nacerá un sexto dedo.
Holografía
Insanidad virtual
Sentido obtuso
Borradura.
Mensajes instantáneos
Solubles en el tiempo
Se dispersan
Se disparan
Achtung!
Say Hallelujah come on get happy
Allez, allez...
Vilkommen!
Benvenuti!
Welcome aboard!
Venite a respirare con noi!
Il treno es so raudo
Stanno tutti bene
Tutti fruti
Cheers for fears
Mon Dieu
Este es el expreso de Babelia
Yo soy el conductor de este tren largo como una serpiente marina
I sono from l'ombelico del mondo
Io penso positivo
Ready to go
Ready-made
Juego ajedrez con Marcel Duchamp
Me siento en su urinario y splash...
E una luce che sa di mare
Je suis desolé
No parlo so many linguas
Mi chiamo Legion
En mí habitan tantos pasajeros
Yo soy el tren que viene del purgatorio y va camino al Paradiso
A railway to heaven
Saudade de tantas cosas
Mientras todos bailan y yo también
Hacen así
La même chose tan de dancers in the movies
In one wagon some ladies come and go talking about michelangelo
Lontananza en la que todos celebramos el estar vivos
¿Qué pasaría si questo treno se descarrilla?
Penitenziatige
Hic nova vita porta est
No importa
Siempre quedarán estos versos
Giugno is not the cruelest month of the year
Si no puedes venir mándame un mensaje de texto
Luego habrás de ponerme un LIKE en Facebook
Ich liebe dich donna dil vento
Vouz le vous coucher avec moi (ce matin)
À quoi penses-tu?
Farfalla, io ti voglio bene
Hiroshima mon amour
No por mucho madrugar, se viaja más temprano
A metà del camino della mia vita
Mi trovai per una selva oscura
I don't go per la via del bene
I wanna be Chaos and Disorder like Jazz Music
Dante walking alone in la strada di Firenza
Dante
Pedante
Viandante
Andante
Allegro ma non troppo
Moderato amabile el poeta
Éramos presos de las ínsulas extrañas
Don't jump
Vietato attraversare i binari
Do not cross the railway lines
Affacciati alla finestra amore mio
El tuerto horrendo que en ardor revienta
Y gordo arremangado dice lata
Einmal ist keinmal
Solemne y rollizo el gordo Buck Mulligan se levantó convertido en un monstruoso insecto que gritó ante todos: Introibo ad altare Dei
Ma quale idea
In questo expresso todos hablamos con el vino
Vino rosso
Vino bianco
Even the ocean is full of wine
Nada le es vedado al Dios Baco
Cinema Paradiso
Voces vivas
Solitudine muerta
¿Qué le dice el saxofón al clarinete?
Cuando no sabes qué es esa música
Don't worry
Es jazz
Jazmine
Jazz
Impromptu
¿Qué le responde el clarinete al saxo?
La música se siente con il cuore que late aprisa
Como un tambor tocado por las manos de Dios
Videmos nunc per speculum at enigmatae
Piove sente como piove in la stazione dil treno
Il viaggio c'est fini
Achtung pasajeros
Get off
The trip is over
Close the door before you leave
Au revoir les enfants!
Alea jacta est!
Verrá la norte a avrá tui occhi

Marcelo Báez Meza: Babelia express (2014)

lunes, 18 de agosto de 2014

ESTO NI SIQUIERA RIMA (fragmento)


Esto ni siquiera rima
dice la musa
y se va decepcionada
patea las piedras y maldice
la hora en que me dio por escribir


No me interesa la fama, sino la trascendencia
dijo el poeta mientras se vestía
¿Entonces por qué llevas tus poemas a concursos y recitales?
preguntó su amante quinceañera
Para llenar el buche y pagarnos el motel


No me importa la trascendencia, sino la fama
dijo el poeta mientras se vestía
¿Entonces por qué quieres destacarte en concursos y recitales?
preguntó su amante quinceañera
Para salir en periódicos y conseguir amantes quinceañeras


No me importa el dinero, ni la trascendencia, ni la fama
dijo el poeta mientras se vestía
¿Entonces por qué llevas tus poemas a concursos y recitales?
preguntó su amante quinceañera
Para darle en la jeta a los de otros grupos literarios


Tracalada de borrachos
nerds, vagos, megalómanos
snobs, maricas, fatuos
intelectualoides de tercer mundo
los poetas siguen siendo incomprendidos


Rafael Méndez Meneses: Selección natural (2010)

domingo, 10 de agosto de 2014

TESTAMENTO

Te preguntan,
¿a quién dejarás tus cosas cuando mueras?
Entonces miré mi casa
y sus objetos.
No había nada que repartir,
salvo mi olor a rancio.
Y la rata.
Ésa que permaneció hostil y silenciosa,
esperando que ocurriera.
Inútil darle de comer
y suavizar su cama con jabón azul.
La esperé cada noche,
ansiosa de ver cómo sus largos bigotes
dejarán de esconder los dientes puntiagudos y depredadores.
Allí estuvo,
mirada astuta
y silencio de esfinge,
esperando que mi sangre corriera.
Vana espera.
La muerte llegó de adentro
por primera vez, calmada y definitiva.
Escribí en la pared su nombre,
para que el último golpe de sol,
a eso de las diez de la mañana,
pusiera sombra en mi testamento:
"La rata no permitió que viera la primavera".
Después de muerta
hice la lista.
Una cena en el mejor restaurante
para Ángeles y Carlos.
Mis libros, mis inéditos guiones para José Ignacio.
Mis sueños para Ibsen.
Mi tarjeta Abra para Ybis.
Mi carro para Alberto.
Mi cama matrimonial para Mario.
Mi memoria para Salvador.
Mi soledad para la Negra.
Mis discos de Ismael Rivera para la Negra.
Mis poemas titulados "Granada en la boca" para la Negra.
Mi dolor de adolescente y madre, para Pedro.
Mis cenizas, para Ernesto.
Mi risa para Marina.
La noche anterior
le había dicho a Ángeles y Carlos
si no puedo dormir
escogeré la muerte.
El pernil de cordero estaba tan sabroso
que no me hicieron mucho caso.
Recuerdo que en una esquina de Chacao,
ella me abrazó y le dije,
el próximo viernes los invito yo.
Su cabello corto
y su felicidad por habérselo cortado,
me hizo entender que no era yo la apaciguada madre de Carlos.
Apoyé mi mejilla sobre su hombro.
Fue algo de segundos,
pero sentí que con la tijera sobre su melena,
algo se había ido.
Algo que no llevaba su nombre,
rondaba ahora las noches de insomnios y alcohol
en el barrio de la familia.
Morirse deliberadamente,
requiere de tiempo y paciencia.
Evocas la muerte gratuita de un hijo,
cosa que a ti nunca te sucedió.
La pérdida de objetos
y el silencio de una casa devastada,
tampoco te sucedió.
El dedo feroz de un enemigo señalándote
como un ser despiadado.
Pasa pero no es mortal.
Dos partos,
diez abortos
y ningún orgasmo.
Una buena razón.
El silencio de tu compañero cuando le preguntas,
¿por qué ya no me quieres?
¿Qué hice?
¿En qué fallé?
Y luego el recorrido por aquellos espacios silenciosos
y vacíos,
con tu presencia encorvada,
torpe.
Constatas que no hay jabón para lavar
ni Favor para planchar
y a lo mejor
esas naranjas están podridas.
Entonces recuerdas
una terraza a las siete de la mañana,
sobre el mar,
y alguien diciéndote,
le tengo miedo a las alturas
pero te amo.
Y luego,
el regreso a la ciudad
y la mazacumba de un hombre desnudo y alegre.
Piensas de nuevo en lo deliberado.
No es azar.
No es venganza.
Es tu mano
de palma sudada,
tocando su muslo.
Remontando un poco más
y recordando el desasosiego de tu compañero,
por la penumbra maloliente
de tu placer.
Siempre hay un antes
antes de morir.
Antes,
quiero comerme unos tortellinis a la crema.
O tomarme un trago de Tanqueray.
O que me abracen con manos fuertes.
O, como dice Caupolicán,
que me pongan en presencia de Maiquetía,
la ciudad más hermosa de este país.
La deliberación entorpece la muerte.
Nadie,
que yo conozca
ha deliberado sobre su desaparición

Miyó Vestrini (1991, publicado póstumamente en 2008)

domingo, 3 de agosto de 2014

ELEGÍA DEL DAULE (fragmento)

                                              IV

En tal zozobra, cuando el ruido alcanza la forma amenazante,
cualquier silencio se convierte en una voz remota
que refiere el pasado a su capricho,
y es como si la naturaleza mismo no respirara,
y atónita la sierva
humilde en su cañiza
se sacrificara por el bien de la tierra humillada...
¡Cómo abunda el aroma de las plantas envueltas en la noche
beber en tus axilas la miera
consagrada a la deidad del río!
¿Puede el amor turbar la superficie inmoble
dentro de ese silencio,
cuando alrededor de aquellas flores y las aves,
de repente se encienden las lágrimas de los progenitores?
Ah si ella misma, en el prodigio, alcanzara a escuchar
el movimiento cauto de la hierba naciente...

Blando era el vientre de la amada en donde mi profunda
humillación pudo callarse;
sus manos, sin ninguna fragancia, sino calma,
me besaban la frente. Los pensamientos en quietud ya tibia,
participaban del calor inocente de los pliegues,
en los miembros desnudos que ignoraban aún aquel advenimiento
o la consagración.
En mí, inasible, te sentía —la imagen ya borrosa por efecto
de los besos y llamas, en plena devoción.
¿No fuimos más hermosos, acaso más nosotros
y más ciertamente humanos
dentro del sufrimiento? ¿O la dicha fue estorbo
en nuestra unión profundamente lejos?
A nadie te comparo
pues nunca tuve trato
con un ser casi arrancado en la hora justa
de aparecer sobre la tierra.

¿Qué manantial se vierte allá, en olvido,
de qué dolor viniste, cuál fue la fecha del desasosiego?
Sólo sabes del río, y entrambos somos islas arrastradas
suavemente a la distancia lúgugre,
y nada nos retiene, somos lágrimas,
volvemos al origen, esa calma azarosa,
en la ignorancia muda,
y seremos amantes en un lapso donde los nombres nada
significan,
los compañeros tan callados,
siempre ausencia.

Finalmente en el aura, desde la mar, se apaga
ese dolor ya viejo, que nunca nos doliera en la aventura:
la luz atisba y nos revela, solos.
Cada ser en su asombro, en la piel arrugada por el sueño,
el pasado que torna su cabeza
—la criatura torpe mete su boca en el estiércol.
Ah, sólo entonces,
vosotros, rodeados de súplicas humildes,
de rodillas,
compartís nuestro duelo.
Quizás no cabe semejanza con esa luz perfecta,
tal vez no somos nadie, aspecto bajo la saliva
de las voces divinas, vuestra gloria.
La eternidad abrasa, y en la calma estéril,
el sol vacía la forma variable
—resto de nuestra cólera, escenas tan vulgares,
nombres sin importancia.
Los gritos últimos de cada ser humano.
El dolor, la insignificancia nuestra,
despacio repta hasta los ojos.
¡Enterrar los misterios junto a la sabiduría,
vagar, vagar errantes,
regresar a ese punto de partida,
recordar hasta el último momento, porque nada es presente!

¿Cómo no preferir tu ignorancia a la culpa,
tu silencio al recuerdo de unos dioses que nunca regresaron
y nos observan, escondidos,
con la alegría insatisfecha de quienes no han logrado,
ni ellos, siquiera,
conservar ese parque en su orden impecable?

Francisco Tobar García: Elegía del Daule (1989)