Podrá morir el rostro oculto de quien la nombra hoy,
pero la palabra que vino desde el fondo de la historia y de la tierra,
ya no podrá ser arrancada por la soberbia del poder.
Nosotros nacimos de la noche.
En ella vivimos.
Moriremos en ella.
Pero la luz será mañana para los más,
para todos aquellos que hoy lloran la noche,
para quienes se niega el día,
para quienes es regalo la muerte,
para quienes está prohibida la vida.
Para todos la luz.
Para todos todo.
Para nosotros la alegre rebeldía.
Para nosotros nada.
Nuestra lucha es por la vida,
y el mal gobierno oferta muerte como futuro.
Nuestra lucha es por la justicia,
y el mal gobierno se llena de criminales y asesinos.
Nuestra lucha es por la historia,
y el mal gobierno propone olvido.
Nuestra lucha es por la paz,
y el mal gobierno anuncia guerra y destrucción.
Para todos la luz.
Para todos todo.
Para nosotros la alegre rebeldía.
Para nosotros nada.
Aquí estamos.
Somos la dignidad rebelde.
El corazón olvidado de la patria.
(Canción atribuida a El Sup en el disco Juntos por Chiapas (PolyGram, 1997).
Está escrita con fragmentos de la Cuarta Declaración de la Selva Lacandona,
firmada por el Comité Clandestino Revolucionario Indígena de la Comandancia General
del Ejército Zapatista de Liberación Nacional el primero de enero de 1996.
La pluma detrás de dicha declaración es sin duda el Subcomandante Marcos.)
Está escrita con fragmentos de la Cuarta Declaración de la Selva Lacandona,
firmada por el Comité Clandestino Revolucionario Indígena de la Comandancia General
del Ejército Zapatista de Liberación Nacional el primero de enero de 1996.
La pluma detrás de dicha declaración es sin duda el Subcomandante Marcos.)